El primer paso para definir nuestro futuro profesional siempre suele ser el que más cuesta, pero también el más importante. “Ahora que ya he terminado los exámenes, ¿qué hago?” ¿En qué me matriculo?” Muchas posibilidades, y a veces también certezas, invaden nuestros pensamientos, creándonos confusión y un sentimiento de inseguridad un tanto incómodo.
Frente a este tipo de conflictos, frecuentes en muchos jóvenes que se encuentran ultimando sus días en Secundaria o Bachillerato, desde el Programa e-FP, recomendamos tomar la decisión una vez se tenga suficiente información. Por eso, para todos aquellos que estéis pensando en estudiar un Ciclo de Formación Profesional o Formación Profesional Dual, desde el programa, queremos compartir con vosotros algunas razones por las que este modelo formativo puede aportaros las herramientas que necesitáis y cubrir las expectativas que tenéis para vuestro futuro laboral.
1. Como la espuma
Así es como está creciendo la Formación Profesional en España. No solo la oferta de ciclos y la demanda por parte de los jóvenes, sino también su reconocimiento por parte de las empresas que, cada vez más, incorporan en sus plantillas a personas que han recibido esta formación. Incluso desde el Gobierno de España se está hablando ya de una reforma de la Ley de FP, en la que se propone una modernización absoluta del sistema.
2. Un modelo con mejores índices de empleabilidad
Los estudiantes de FP se han convertido en los candidatos perfectos para las empresas. Según un informe de Infoempleo y Adecco, la caída en la demanda de perfiles universitarios y de máster ha jugado en favor de los titulados en FP. Así pues, se convierte en un modelo fundamental para fomentar el empleo juvenil hoy en día. La tasa de desempleo desciende a solo el 7,56% en el Grado Medio y al 6,91% en el Grado Superior. Así, las familias de FP que mejores índices de empleabilidad tienen actualmente son: Informática y Comunicación, Electricidad y Electrónica y Administración y Gestión de empresas.
3. En la variedad está el gusto
La Formación Profesional dispone de una amplia oferta formativa. Existen 26 familias profesionales y más de 140 ciclos formativos de Grado Medio y Grado Superior. Hay titulaciones para cualquier área profesional e interés personal. En definitiva, siempre tendrás dónde escoger con grados que se adecúen a tus gustos y aptitudes.
4. Un modelo que se adapta a tus inquietudes y necesidades
Otra de las grandes características de la Formación Profesional es su alto grado de adaptabilidad. No existe un límite en el que se encuadre el desarrollo de los estudios, sino que son combinables. Así pues, después de cursar un Grado Medio se puede estudiar un Grado Superior; y si has hecho uno Superior, después puedes hacer un grado universitario y viceversa. Además, otra de sus grandes ventajas en este sentido es la duración: a diferencia de la mayoría de estudios universitarios, la Formación Profesional tiene una duración de dos años.
5. Con una aplicación real
Si algo bueno tiene la FP es cómo confluyen la parte teórica, en la que se adquieren los conocimientos, y la parte práctica, en la que esos conocimientos se materializan en proyectos concretos. Esto lleva a tener experiencia técnica ya desde la primera inmersión profesional.
En definitiva, la Formación Profesional es una de las opciones que más fuerza está cogiendo en los últimos años, gracias, como ves, a su versatilidad. Versatilidad que es posible, además, gracias a iniciativas como e-FP, que ofrece, a los estudiantes que se decantan por este modelo formativo, la oportunidad de desarrollar su espíritu emprendedor y su capacidad innovadora de la mano de profesores y mentores, mediante una propuesta académica que incentiva la innovación y la creatividad.
¿Todavía no lo tienes claro? Sigue informándote, pregunta, sé inquieto. Y si tienes dudas sobre nuestro programa o necesitas que te facilitemos más información, no dudes en ponerte en contacto con nosotros: https://e-fp.es/contacto